En la actualidad hemos sido bombardeados con la idea de la extinción de la humanidad por el inicio del apocalipsis zombi donde solo Brad Pitt y Milla Jovovich son capaces de sobrevivir a estos patógenos inmortales.
¿Pero existe en verdad un super patógeno mortal?
Se conocen varios mecanismos por el cual los organismos pueden adquirir habilidades que no tenían y uno de los más interesantes es lo que llamamos la “promiscuidad procariota”, pero que significa esto, pues es el hecho que en los procariotas no existe ningún tipo de prejuicio, perjuicio o discriminación entre ellos, y tienen la capacidad de transferir información genética de manera casi indiscriminada.
Los procariotas tienen uno o más cromosomas que tienen los genes necesarios para sobrevivir y mantener su metabolismo, pero también pueden tener plásmidos son muy importantes en la supervivencia y éxito de los microorganismos ya que en estos plásmidos pueden contener información que en condiciones adecuadas los vuelve super patógenos.
Los plásmidos son pequeños fragmentos de ADN que no tienen los genes de mantenimiento, por eso no se consideran cromosomas
Los plásmidos existen particularmente 2 que son muy importantes para el humano: el primer grupo son llamados islas patogénicas, que son grupo(s) de genes que le dan la habilidad al microorganismo de invadir, infectar y atacar a un organismo hospedero, es decir, tener mayor capacidad de virulencia. El otro grupo que es muy importante para nosotros son los paquetes genéticos de resistencia a antibióticos, y es exactamente como suena, los microorganismos que son resistentes a uno o mas antibióticos, pueden transmitir esta información a otras bacterias.
Virulencia: del latín virulentus que significa «lleno de veneno» y significa que tan nocivo puede ser una bacteria, hongo, protozoo, microalga o virus, es decir la capacidad que tiene de enfermar a su hospedero.
Pero y como ocurre esto, pues es aun mas sencillo de lo que podríamos pensar simplemente el microorganismo que tiene esta habilidad saca copias del plásmido y lo libera al ambiente, las células cercanas que este en contacto o cerca pueden entonces introducirlo en sus propias células y así las dos ya tienen la capacidad de resistir al antibiótico que la célula original tenía resistencia. Entonces, si las condiciones son adecuadas, un microorganismo mediante varios eventos de transferencia genética podría adquirir las habilidades de otros organismos y así convertirse en un super patógeno, y ahí si aunque no es el invierno quien viene, podría ser algo igual de mortal.
Hay algunos factores que aumentan la posibilidad de que se puedan dar estos eventos como la automedicación y el no terminar los tratamientos, ya que no se elimina al patógeno, pero es posible que un tratamiento mal cuidado genere cepas resistentes. También la altísima transferencia y acarreo de microorganismos a lugares donde no tiene competidores naturales, o que son favorecidos por el ambiente, esto debido principalmente a la movilidad humana y el comercio.
Y pues si, la existencia de un super patógeno es posible, y en conjunto con el abuso de los antibióticos de manera indiscriminada y no permitir el desarrollo de la inmunidad natural, puede favorecer que en un futuro se produzca un super patógeno, que podría diezmar a una humanidad cada vez más inútil en su biología para defenderse.