Provisión de agua
Las áreas naturales protegidas (ANP) son la estrategia más importante para conservar el patrimonio natural de México, el cual incluye ambientes terrestres, marinos y de agua dulce. La mayoría de ellas son creadas y manejadas con el objetivo de conservar la biodiversidad, sin embargo, existen muchos otros valores importantes que se deben de tomar en cuenta. Más allá de la importancia de las ANP como espacios que permiten el mantenimiento de la biodiversidad y los procesos ecológicos, éstas también proveen a la sociedad una amplia variedad de bienes y servicios.
En al menos las ANP federales en México, habitan más de cuatro millones de personas, lo que hace que estos espacios naturales tengan una visión social y que estén comprometidos con el beneficio a la sociedad que habita dentro de ellas. En ese sentido, la conservación de la biodiversidad en las ANP está inscrita en un contexto que incluye la inminente necesidad de proveer bienestar y generar un desarrollo social y económico para la población, a través de la provisión de una serie de bienes y servicios derivados de la biodiversidad.
De estos bienes y servicios destaca la provisión de agua, que incluye la regulación de los flujos de agua y el mantenimiento de la calidad y cantidad de la misma. Las ANP poseen un valor asociado con los usos económicos que se le asignen al agua, ya que ponen a disponibilidad el agua superficial y subterránea, haciendo que la presencia de estos espacios naturales esté asociada con la contribución a la economía. La vegetación natural que poseen las ANP permite el mantenimiento de la calidad del agua y ayuda a incrementar su cantidad, por medio de la filtración después de la precipitación y del mantenimiento de caudales naturales.
Los usos que se le dan al agua obtenida de las ANP incluyen usos agrícola, industrial, comercial o ganadero, así como para el abastecimiento público y para la generación de energía a través de termoeléctricas o presas hidroeléctricas. De manera general se puede decir que las ANP coadyuvan a tener una mayor disponibilidad de agua, ya que existe una relación significativa entre su disponibilidad y los municipios donde están establecidas. Así también existe una incidencia en la disponibilidad de agua para las zonas metropolitanas.
Las ANP en México no solamente deben de ser vistas como lugares para la protección de la biodiversidad, si no como las proveedoras de una seria de beneficios directos e indirectos para la sociedad mexicana, incluida la disponibilidad de agua.
De ello surge la necesidad de demostrar y comunicar la razón por la cual las ANP contribuyen al bienestar de la humanidad gracias a los servicios ambientales que aportan. Por ello, es necesario dar a conocer estos valores que poseen, lo que hará que cada vez los mexicanos apoyen su conservación.