La noticia de que hemos llegado al punto de agotamiento de recursos ha circulado por las redes, pero existe una duda generalizada
¿Y que significa el día que agotamos los recursos?
¿Entonces ya no hay que comer?
¿Esto me afecta en algo?
El día del agotamiento de los recursos es un calculo realizado por la Red de la Huella Mundial y se basa en un calculo de la capacidad del planeta para producir recursos renovables y el consumo mundial de los recursos, es decir la huella ecológica.
¿Huella ecológica?
Si, la huella ecológica es la cantidad de tierra, agua y aire que un individuo, población o actividad requiere para producir todos los recursos que consume y para absorber los desechos que genera, utilizando la tecnología y las prácticas productivas para cada región.
Esta huella ecológica generalmente se mide en hectáreas globales, y de manera sencilla es el impacto, gasto y agotamiento en el ambiente, de los recursos naturales y de los servicios ambientales necesarios para la manutención y supervivencia del hombre moderno en la tierra.
¿Cómo se calcula la huella ecológica?
Se calcula cuantificando la producción y la demanda que hay sobre la naturaleza.
La demanda ecológica mide los activos ecológicos que una población necesita para producir los recursos naturales que consume incluidos alimentos y productos de fibra vegetal, ganado y productos pesqueros, madera y otros productos forestales. Esta demanda ecológica también incluye la superficie de suelo para infraestructura urbana, lo necesario para absorber sus desechos como las emisiones de carbono.
La Huella Ecológica monitorea el uso y explotación de seis categorías productiva: tierras de cultivo, tierras de pastoreo, zonas de pesca, tierras urbanizadas, áreas forestales y demanda de carbono en la tierra.
Del lado contrario la oferta ecológica, que incluye los recursos naturales y servicios ambientales, es decir la biocapacidad de una ciudad, estado o nación para producir y sostener sus activos ecológicos (incluidas las tierras de cultivo, las tierras de pastoreo, las tierras forestales, los caladeros y las tierras urbanizadas).
Estas áreas, especialmente si no se cosechan, también pueden absorber gran parte de los desechos que generamos, especialmente nuestras emisiones de carbono.
¿Qué es el día del agotamiento de los recursos?
Cuando obtenemos la capacidad de producción y el calculo de la necesidad se hace un cálculo muy sencillo.
Ejemplo:
Capacidad ecológica de un país: 200 toneladas al año.
Demanda ecológica del país: 365 toneladas al año.
La demanda diaria seria igual a 365/365 = a 1 tonelada por día.
Si hacemos un cálculo rápido entonces nuestra capacidad de producción ecológica nos permite mantener a nuestra población hasta el día 19 de julio, y a partir del 20 de julio estaríamos en déficit ecológico por haber superado nuestra capacidad para producir recursos. Es decir, necesitaríamos que la producción aumentara un 82.5% o 1.825 países para satisfaces las necesidades.
Por ejemplo, para México el día de agotamiento será el día 29 de agosto, esto quiere decir que necesitamos aumentar en 51% nuestra biocapacidad, y incentivar la transferencia tecnológica para aumentar la capacidad de producción y disminuir la presión sobre los ecosistemas.
¿Entonces, ya no hay que comer?
El informe de la Red de la Huella Mundial indica que hay países con déficit ecológico siendo los países con mayor déficit Qatar (9 de febrero), Luxemburgo (19 de febrero), Emiratos Árabes 4 de marzo), Estados Unidos (18 de marzo) y Kuwait (22 de marzo).
A nivel mundial son 135 países los que tienen sobregirada su cuenta bancaria ambiental, y están viviendo de prestado o utilizando créditos de otros países.
A nivel mundial el día de agotamiento a disminuido un poco, ya que se ha invertido de manera general en las energías alternativas, disminuyendo la necesidad de los combustibles fósiles, aunque es solo el inicio.
Pero hay algunos aspectos a considerar…
En México, según datos de SAGARPA y de la FAO en México se pierde cerca del 30% de la producción agrícola en las etapas previas a la venta, es decir en la cosecha, recolección, acopio y transporte. De estos alimentos agrícolas que llegan a puntos de venta y distribución el 10% se desperdicia por manejo, por exceder el tiempo de anaquel y por no ser atractivos al comprador.
Entonces tan solo en la etapa previa al consumidor tenemos un 37% de perdida de la producción.
En nuestras casas el ejemplo sigue, en América del Norte se estima hay una perdida por desperdicio de 95 a 115kg de alimentos al año, es decir entre 260 y 315 gramos diarios por persona. Considerando que una persona en promedio requiere entre 900gr y 1.2kg de alimento por día. Es decir, una quinta parte de los alimentos en casa terminan siendo desperdicio, un 12.6% de la producción que sumados nos da un 42.6% de la producción total termina siendo basura.
¿En serio, la mitad de nuestra comida termina en la basura?
Si, en general hay poca industria de la transformación a nivel regional y eso no permite la correcta conservación y procesamiento de alimentos (secado, mermeladas, molienda, no debe considerarse aquí a los alimentos hiperprocesados).
¿Qué puedo hacer para disminuir mi huella ecológica?
Para disminuir la huella ecológica es sencillo:
- Siembra plantas y árboles para disminuir la huella de carbono
- Compra porciones adecuadas a tu necesidad alimenticia
- Disminuye tu ingesta de carnes y aumenta tu ingesta de vegetales
- Produce y cosecha tus propios alimentos
- Usa productos biodegradables
- Recicla, Reutiliza, Recupera y una mas importante reduce tu consumo.
- Reprodúcete con responsabilidad
Aunque tenemos varios países que no tiene déficit ecológico, este indicador es un llamado a que la sobrepoblación, el consumismo y el agotamiento de recursos es una realidad tangible, que en conjunto con el calentamiento global y el cambio climático es necesario reducir nuestro impacto ambiental.
Se parte del cambio, disminuye tu huella ecológica e invita a otros a hacerlo también.
Calcula aquí tu huella ecológica
Mapas interactivos de la huella ecológica mundial
Los países con déficit ecológico
Con información de:
http://www.fao.org/3/a-i2697s.pdf